jueves, 28 de noviembre de 2013

Centrales hidroeléctricas

La energía hidroeléctrica es electricidad generada aprovechando la energía del agua en movimiento. La lluvia o el agua de deshielo, provenientes normalmente de colinas y montañas, crean arroyos y ríos que desembocan en el océano. La energía que generan esas corrientes de agua puede ser considerable, como sabe cualquiera que haya hecho descenso de rápidos.

Este tipo de energía lleva años explotándose. Los agricultores, desde la Grecia antigua han utilizado molinos de agua para moler trigo y hacer harina. Localizados en los ríos, los molinos de agua recogen el agua en movimiento en cubos situados alrededor del molino. La energía cinética del agua en movimiento gira el molino y se convierte en la energía mecánica que mueve el molino.

A finales del siglo XIX, la energía hidroeléctrica se convirtió en una fuente para generar electricidad. La primera central hidroeléctrica se construyó en Niagara Falls en 1879. En 1881, las farolas de la ciudad de Niagara Falls funcionaban mediante energía hidroeléctrica. En 1882, la primera central hidroeléctrica del mundo comenzó a funcionar en Estados Unidos en Appleton, Wisconsin.

Una central hidroeléctrica clásica es un sistema que consiste en tres partes: una central eléctrica en la que se produce la electricidad; una presa que puede abrirse y cerrarse para controlar el paso del agua; y un depósito en que se puede almacenar agua. El agua de detrás de la presa fluye a través de una entrada y hace presión contra las palas de una turbina, lo que hace que éstas se muevan. La turbina hace girar un generador para producir la electricidad. La cantidad de electricidad que se puede generar depende de hasta dónde llega el agua y de la cantidad de ésta que se mueve a través del sistema. La electricidad puede transportarse mediante cables eléctricos de gran longitud hasta casas, fábricas y negocios.

Hoy en día, en la Mesopotamia Argentina se pueden encontrar las centrales hidroeléctricas:


Impacto Ambiental de las represas en Misiones

"No a las mega hidroeléctricas"


La construcción de una represa y el embalse que ella produce, si ésta se construye en zonas ecuatoriales, tropicales, y subtropicales como las proyectadas en el nordeste argentino y en particular en la provincia de Misiones, tendrán impactos ambientales, sociales, y económicos sobre el medio natural y humano existente en su área de influencia, agrediendo al agua como recurso, la biología acuática y terrestre, además de nefastas acciones a la riqueza cultural e histórica de la región.

Toda represa que se construya en cualquiera de las zonas antes mencionadas, por infinidad de razones impactará seriamente en la salud de sus habitantes, actuando como verdaderas bombas biológicas.

Con la construcción de nuevas represas, se producirá un aumento de las áreas inundadas, las aguas de los lagos, como la de los arroyos tributarios tanto urbanos como rurales, con aporte de nutrientes, ampliaran la posibilidad de incremento de vectores. Las posibles fluctuaciones de los niveles hidrométricos, han de permitir, por la existencia de barros, la presencia estable de más de 85 especies de mosquitos de géneros Aedes, Anopheles, Coquilletidea, Culex, Haemagogus, Psrophora y Sabethes; también se puede hablar de Eutrofización, que será el resultado del enriquecimiento de la masa líquida, con los nutrientes debido inicialmente a la vegetación en descomposición, con la contribución de la escorrentía del suelo; obstruirán las corrientes y ensenadas, formarán murallas flotantes y disminuirá la transparencia del agua.

Las grandes acumulaciones de estas algas, formarán pilas en descomposición y condiciones perjudiciales sobre los bordes, allí se formarán focos de reproducción de insectos y moluscos, propiciando el hábitat ideal de vectores de las enfermedades que hoy son endémicas a muy pocos kilómetros de nuestra provincia, entre ellos los moluscos del género Biomphalaria (transmisor de la esquistosomiasis – el mal de las represas, que convirtió a Brasil en el país más contaminado del mundo, con cifras de enfermos que superan los doce millones de habitantes).

Hoy la provincia de Misiones ya sufre las consecuencias de Yacyretá: Dengue, Leishmaniasis visceral, Paludismo, y casos sospechosos de fiebre amarilla en Puerto Iguazú. La elevación de la altura del agua, por supuesto, creará un gran aumento de las superficies cubiertas, tanto en el embalse, como en los arroyos que desembocan en él, lo cual expulsará de sus hábitat a todos los seres vivientes de la zona inundada, activando también la migración de vectores silvestres, como roedores y marsupiales, a áreas pobladas, permitiendo la instalación en ellas de enfermedades de ocurrencia hasta poco tiempo exclusiva en zonas rurales como Leptopirosis y como resultado de la tala de la vegetación, en las costas de inundación y en las islas, se podrá activar la migración del murciélago portador del virus rábico. Las altas temperaturas promedio registradas en la región sumadas a la falta de obras que tiendan al saneamiento básico, la ausencia de redes cloacales y plantas de tratamiento, la falta de control en la eliminación de los desechos industriales serán hechos que sin dudas, contribuirán a aumentar el riesgo de propagación de enfermedades.

Todo lo expuesto es un pantallazo de las consecuencias negativas que tendrán las represas proyectadas para la región (Corpus, Garabí, Roncador).

Hace 2.500 años, Heráclito expresaba: “Cuando falta la salud, la sabiduría no puede revelarse, la cultura no puede manifestarse, la fuerza no puede luchar, la riqueza carece de utilidad y la inteligencia tiene las manos atadas”.

Papelera UPM (ex Botnia)

¿Qué es una papelera?

Una papelera es una planta que produce papel. El papel se produce a la vez con pasta de celulosa que se elabora en pasteras. las famosas PAPELERAS son llamadas así erróneamente ya que allí no se produce papel sino pasta de celulosa que se exporta a Europa. 

¿Por qué son perjudiciales?

El proceso de elaboración de pasta de celulosa tiene varias formas. Van desde aquellas muy contaminantes hasta aquellas mas amigables con el medio ambiente. Curiosamente el problema no es la elaboración, sino el blanqueo de la pasta que naturalmente es amarillenta pero en el proceso de blanqueo se utiliza hipoclorito industrial (una lavandina fuerte) que contamina tremendamente. Mata todo y no deja ni hongos... 
Cuando la pulpa de celulosa es blanqueada utilizando cloro elemental, se forman subproductos no deseados como las dioxinas y los furanos. Altas concentraciones de estas sustancias han sido la causa del cierre de varias factorías de pescado en la Columbia Británica en 1992. 
Sin embargo, las mejoras en el proceso de blanqueo permiten la eliminación total de la utilización de cloro elemental, al desarrollarse las tecnologías Libre de Cloro Elemental (Elemental Chlorine Free, ECF) o Totalmente Libre de Cloro (Totally-Chlorine Free, TCF), combinado con delignificación con oxígeno. Estas tecnologías reducen significativamente la cantidad de compuestos clorados librados en el ambiente. 
UPM (la pastera de la que se habla, ex BOTNIA) utiliza el metodo ECF (el método ya explicado)

Un gramo de Dioxina puede matar a un ser humano tranquilamente. Una de estas plantas derramarán y verterán al Río Uruguay 29 kgs. de dioxina por día. Estas plantas consumirán 1000 lts. Por segundo de agua (el bien más usado del planeta tierra a futuro) osea 3 millones de lts. Por hora y 86 millones de lts. Por día (esto es el consumo total de la población de Fray Bentos de agua en un mes).**Contaminación del aire**: Emisiones de azufre, dioxinas y furanos que producen cáncer y enfermedades respiratorias severas en la salud humana, cefaleas, dolores abdominales, conjuntivitis, faringitis, obstrucción bronquial, nauseas y vómitos, crisis de pánico – trastornos de sueño, anorexia (esto ocurre en la población de Valdivia por la planta de celulosa) lo afirma el Dr. Juan R. Silva de la Paz, médico chileno muerto por estas consecuencias ambientales en Valdivia. 

¿Por qué se instalan acá? 

El árbol utilizado para elaborar pasta de celulosa es el eucaliptus. En Europa un eucaliptus crece en aproximadamente 20 años, sin embargo en América latina crece en 5 años. Esto le da mayor potencial de producción ya que el consumo de papel ha aumentado un 1500% desde el lanzamiento de las HOME PRINTERS o sea, la impresora que se encuentra en cualquier hogar.

¿Existen otras papeleras?

URUGUAY 
En Uruguay existen 3 plantas que producen cien veces menos que todas las plantas argentinas (sin contar UPM) 

ARGENTINA 
En Argentina, hay alrededor de 15 plantas de celulosa. Siete sobre el Río Paraná, a saber: Alto Paraná, Misiones (Puerto Esperanza, Misiones), que produce 350.000 toneladas por año (t/a), Celulosa Argentina (Capitán Bermúdez, 150.000 t/a), Papel Prensa (San Pedro, Buenos Aires, 150.000 t/a), Papel Misionero (Puerto Mineral, Misiones, 70.000 t/a), Celulosa Puerto Piray (Misiones, 30.000 t/a), Celulosa Campana (Buenos Aires, 30.000 t/a) y Celulosa Argentina (Zárate, Buenos Aires, 20.000 t/a), que totalizan 800.000 toneladas. Incluso en la propia Entre Ríos existe una papelera de 17.900 t/a.  Algunas de ellas (Alto Paraná, Puerto Piray y Papel Misionero ya fueron desarrolladas, ver índice)

Por otra parte, hay nuevos proyectos (y grandes) y proyectos de ampliación de la capacidad de los ya existentes en la región. Varias de las plantas argentinas utilizan tecnologías más antiguas y mucho más contaminantes que que las que se utilizan en Uruguay. BOTNIA URUGUAY cuenta con un "Plan de Producción limpia" con tecnología TCF (Totalmente Libre de Cloro) y con circuito cerrado de fluentes. 
Pero sobre las plantas de celulosa que ya existen en Argentina, ninguna de las cuales (de las que blanquean químicamente) utilizaba esta tecnología (de hecho, algunas ni siquiera son ECF) sólo dijeron que "Argentina debe revisar también la conducta de las empresas emplazadas dentro de su territorio". De suspender ni hablaron. 


Papel Misionero

Papel Misionero (Misiones). 




Cuestionada por ambientalistas por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: TCF. 


NOTICIA:
"Paraguay denuncia a la Argentina por papeleras contaminantes"

La Secretaría del Ambiente de Paraguay presentó una denuncia formal ante la Fiscalía de Estado de ese país. Pide que determinen el grado de contaminación que producen las papeleras en el río Paraná, compartido por ambas naciones. Aseguran que el establecimiento industrial tomado como testigo operaría con una tecnología obsoleta y contaminadora. Las empresas cuestionadas son Alto Paraná (Puerto Esperanza, provincia de Misiones); Papel Misionero (Capioví, Misiones); Celulosa Campana S.A. y Celulosa Puerto Piray. 

En Argentina hay varias gigantescas papeleras, que utilizan para su provecho grandes extensiones de bosque y extraordinarios volúmenes de aguas. Algunas de ellas están en manos de empresas multinacionales; aquí una lista de las 11 principales: 1) Alto Paraná (Misiones). 2) Celulosa Puerto Piray (Misiones). 3) Papel Misionero (Misiones). 4)Celulosa Campana S.A. (Buenos Aires). 5)Papel Prensa (Provincia de Buenos Aires). 6) Massuh (Provincia de Buenos Aires). 7) Productos Pulpa Moldeada (Río Negro). 8) Papelera del Tucumán (Tucumán). 9) Papelera del NOA (Jujuy). 10) Ledesma (Jujuy). 11) Celulosa Argentina (Santa Fe). 

El Ministro de la Secretaría del Ambiente paraguayo, Alfredo Molinas, finalmente solicitó a la Fiscalía General de Estado de ese país que investigue "si existe no contaminación" por parte de los establecimientos industriales de Misiones, que elaboran pasta celulósica, "poniendo en riesgo al ambiente y a las personas que habitan en la comuna de Carlos Antonio López, departamento de Itapúa, Paraguay, a partir del vertido, sin tratamiento previo, de efluentes industriales que -entienden-, contaminarían con sustancias tóxicas al río Paraná", según consta en la denuncia que presentó este viernes 17 en Asunción. La denuncia parte de la verificación que el propio Molina realizó en el lado argentino del río Paraná, en proximidades de las fábricas, donde existen actividades de contaminación, según dice el escrito que elevó ante la Fiscalía de Estado de su país, donde también invocó el delito tipificado en el artículo 203 del Código Penal de Paraguay, que trata los hechos punibles contra la seguridad de las personas frente a riesgos colectivos. Una fuente de la Secretaría del Ambiente estatal aseguró que de detectarse contaminación, habrá que identificar a los responsables del delito, aunque la denuncia expresa que es "contra personas innominadas". 

Por otra parte, once grandes empresas argentinas usan tecnología contaminante, según denunciaron ambientalistas locales. Estas papeleras son las que, silenciosamente hasta ahora, vienen produciendo y en muchos casos, según denuncias, contaminando en la Argentina. Las más conflictivas son Alto Paraná y Celulosa Puerto Piray, en Misiones; Celulosa Argentina, en Capitán Bermúdez; Ledesma, en Jujuy; y Papelera del Tucumán. 

Este último caso es el único donde cabe anotar una victoria en la lucha por preservar el medio ambiente, ya que la Cámara Federal de Tucumán dispuso el procesamiento de los directivos de esa empresa. En la otra historia que enseñan estas papeleras, el problema de la contaminación no se reduce a la tecnología empleada (el debate central en torno de las plantas de Uruguay) sino que, aun antes de que haya empezado a funcionar la primera máquina, empieza en el desastre ambiental que pueden causar las plantaciones de pinos foráneos -como se denuncia en Misiones- o en las enfermedades causadas por el bagazo usado como materia prima -como se denuncia en Jujuy-. Las denuncias sobre Misiones ejemplifican la "piedra libre" que las empresas estarían en condiciones de lograr, no sólo por la inacción de las autoridades reguladoras sino por la extorsión de hecho a la que pueden ser sometidas las poblaciones cuando sus fuentes tradicionales de subsistencia -por caso el cultivo de yerba mate- les han sido sustraídas. 

"No a las papeleras"
El uruguayo Ricardo Carrere forma parte de la ONG Guayubira, que viene sosteniendo una consecuente oposición a la instalación de las plantas de celulosa de Botnia y Ence en Fray Bentos -que incluyó la presentación de una carta abierta al gobierno uruguayo firmada por decenas de investigadores universitarios-. Este ambientalista efectuó una investigación en la provincia de Misiones, donde observó que "en Papel Misionero hay una contaminación tremenda del río; apenas han puesto una redecita para que no se note la espuma". Pero la planta que más interesaba a Carrere era Alto Paraná, que utiliza una tecnología de blanqueo (parcialmente libre de cloro) similar a la que emplearán las fábricas de Fray Bentos. Empezó por advertir el "lamentable estado del río, donde los peces han desaparecido, las aves brillan por su ausencia y el aire huele a huevo podrido". Además, el ambientalista se detuvo en un problema que no depende de la tecnología de blanqueo: el reemplazo de la biodiversidad propia de la selva misionera por uniformes plantaciones de pinos: "El sector forestal insiste en llamar 'bosques' a los monocultivos de árboles: intentan convencer de que están llevando una 'reforestación' pero estas plantaciones no tienen nada en común con un bosque y menos aún con la enormemente diversa selva misionera", comentó Carrere. Un ejemplo serían los efectos causados por "el polen de los pinos: tratándose de grandes masas de árboles de una o dos especies, todos florecen en la misma época y desprenden enormes cantidades de polen, generando problemas respiratorios y alérgicos". Otro efecto ecológico impensado es "la invasión de mosquitos": porque "el alto consumo de agua por las plantaciones de pinos hace desaparecer a las ranas, que controlaban la población de mosquitos", explicó Carrere. 

Esto se articula con las manifestaciones de vecinos del triángulo formado por las localidades de Puerto Esperanza, Puerto Libertad y Wanda, donde viven unas 40.000 personas, en las proximidades de la planta Alto Paraná. 

Todos ellos pidieron reserva de sus nombres. Es que, según uno de ellos, "al principio yo denunciaba mucho pero tuve que dejar de hacerlo cuando empecé a recibir amenazas y la familia me puso un freno". Este vecino advirtió que "Alto Paraná desmonta hasta la orilla de los cursos de agua y así las aguas se contaminan con agrotóxicos y algunos arroyos, sin la protección del bosque, se secan". Otro vecino afirmó que "cuando se corrió la bola de que compraban tierras, hubo una estampida de colonos queriendo venderles la chacra: por la yerba, que fue hace unos años el oro verde, ahora no pagan más que 18 centavos el kilo; y lo mismo pasa con el té, con los citrus". Un tercer vecino contó, al diario argentino Página 12, que "en los cítricos se forman pintitas negras, las mandarinas se secan. Tengo tres árboles de mandarina y ninguno está dando fruta; los vecinos más viejos dicen que, antes de la fábrica, no era así". Este vecino vive al sur de la planta, adonde "cuando hay viento norte, el olor se siente muchísimo más fuerte. Es nauseabundo". Y "en los lugares del Paraná donde arrojan el desecho, el río cambia de color, toma un color amarillento, hay peces muertos, qué sé yo qué echan ahí". 

Y, en cuanto a las personas, "aumentaron mucho las enfermedades respiratorias y también las de la piel, y hay mucha gente con distintos tipos de cáncer", según afirman los vecinos. "Hay mucha gente con asma, todos los problemas respiratorios se agudizan", aseguran. Pero "ni los médicos ni nadie quiere hablar -sostuvieron-; los efectos ambientales no se pueden demostrar porque el Ministerio de Ecología jamás hizo un estudio, y, si lo hizo, nunca conocimos los resultados". 

Según denuncian los vecinos misioneros, "estas empresas tienen piedra libre: en Celulosa Puerto Piray, hace seis años, el Ministerio de Ecología llegó a labrar un acta por falta de tratamiento de efluentes, pero la empresa amenazó con cerrar la planta y, como todo el pueblo depende directa o indirectamente de ella, la gente misma pidió levantar la medida".


Celulosa Puerto Piray

Celulosa Puerto Piray (Misiones) 



Cuestionada por vecinos por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: utiliza cloro elemental. 


Oberá. Refiriéndose al tema de las papeleras y aun informe publicado dias atrás por un diario dominical nacional, el Subsecretario de Obras y servicios públicos, Oscar Perrone señaló que “mi opinión personal es que cualquier instalación de estas trae problemas, es cierto que las mismas con antiguos procesos son muy contaminantes, pero no debería haber contaminación con la tecnología y procesos que hoy se cuenta”. 
Como ex Decano de la Facultad de Ingenieria comprometido en el tema años atrás sostuvo que “en Misiones hay 3 papeleras y hay que reconocer que una de ellas al menos es contaminante que es Celulosa Puerto Piray, nosotros en la Facultad de Ingeniería- cuando estaba al frente de la misma- realizamos un trabajo de relevamiento y se detectó irregularidades”. 
Acotó que “la planta de Piray es del año 28 con un proceso muy antiguo que nunca se renovó. Sin embargo, cuando desde el gobierno se cerró la misma, los empleados salieron a cortar las rutas en defensa de su trabajo, aunque creo que hay que tomar una decisión respecto a esto, no se si va a pasar mucho tiempo para que se vuelva a clausurarse, porque creo sigue en las mismas condiciones”. 
Explicó que “lamentablemente, muchas veces los malos empresarios utilizan al personal como escudo, antes de beneficiar a toda la población, y mientras tanto siguen adelante con su negocio. Las otras dos papeleras, por lo que sé, están en condiciones y no contaminan”. 
No obstante, el funcionario remarcó en declaraciones a FM Litoral que “cualquier proceso industrial tiene afectación sobre el medio ambiente, eso es un hecho, pero hay que minimizar esos impactos ambientales hasta donde se pueda, realizar controles sistemáticos siempre” 


Papelera del Alto Paraná

Alto Paraná (Misiones)


Cuestionada por ambientalistas y vecinos por contaminación de agua, aire y destrucción de bosques nativos. La empresa afirma cumplir el estándar internacional. Tecnología: ECF.

La preocupación por los posibles daños ambientales provocados por los gases y olores provenientes de la planta industrial celulósica de la firma Alto Paraná SA ubicada en Misiones y el pedido de informe al Ejecutivo Nacional sobre las circunstancias del deceso de dos trabajadores en las instalaciones de la planta es lo resuelto por la Cámara de Diputados de la Nación a través de la aprobación de dos proyectos de Resolución presentado por la legisladora Blanca Osuna.

Uno de los proyectos de Resolución presentado por la legisladora entrerriana y aprobado en la Cámara Baja de la Nación expresa la "profunda preocupación por los posibles daños ambientales, turísticos, sociales y en la salud humana provocados por las emisiones de gases y olores nauseabundos provenientes de la planta industrial celulósica de la firma Alto Paraná S.A. ubicada en Puerto Segundo, en las inmediaciones de la localidad de Puerto Esperanza, Provincia de Misiones.

Asimismo, y dentro de los Fundamentos del proyecto, la diputada Osuna sostiene que “corresponde a las autoridades nacionales velar por la protección del medio ambiente y la salud de la población. En tal sentido, esta situación de riesgo ambiental ya ha sido planteada al Gobierno de Misiones, encargado primario de hacer cumplir la normativa pertinente”, y precisa que “el presente proyecto propone expresar al Poder Ejecutivo nacional la preocupación de esta Honorable Cámara al respecto, con el propósito de llamar la atención de la comunidad política nacional sobre esta cuestión y darle así la relevancia que merece”.

Cabe destacar que el proyecto establece extender una copia de éste a la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Ministerio de Salud y Ambiente de la Nación.

· Olores y gases 



En los Fundamentos del mencionado proyecto se incluye detalles del holding chileno Arauco, principal productor de celulosa en América del Sur y tercero en el mundo, controlando varias empresas de gran tamaño, diversas plantas de celulosa y aserraderos, un laboratorio de investigaciones genética denominado Bioforest y en nuestro país, Alto Paraná S.A.

Puntualmente, a lo que a la planta celulósica de Alto Paraná S.A. se refiere, se indica que está radicada en Puerto Segundo, Puerto Esperanza, Provincia de Misiones. También se brinda precisiones sobre la producción (produce al año unas 350.000 toneladas de celulosa de fibra larga, blanqueada en dos tipos (Kraft y Celulosa Fluff). Señala que el proceso para obtener la fibra es conocido como proceso ácido, al Sulfato Kraft, y que si bien en teoría este proceso tendría que ser hermético, los escapes son frecuentes.

La legisladora recuerda que dicho proceso industrial estuvo en la raíz de un desastre ambiental de gran envergadura que el grupo empresario protagonizó en la República de Chile en febrero de 2004, y cita la denuncia que oportunamente efectuó el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales ante las autoridades que tuvo como corolario un posterior estudio de la Universidad Austral de Valdivia que determinó la responsabilidad directa del Grupo Arauco por la destrucción del ecosistema.

Menciona la orden de cierre temporal que determinó la Comisión Regional del Medioambiente de la X Región a raíz de las numerosas irregularidades detectadas respecto a las disposiciones de la ley de calificación ambiental, y la visita que en 2005 realizó la organización no gubernamental Guayubira a la planta de Puerto Esperanza con el fin de analizar el posible efecto de las plantas de celulosa a instalar en Fray Bentos (República Oriental del Uruguay) frente a Gualeguaychú (Entre Ríos, Argentina).

Más adelante, la diputada cita el testimonio de visitantes de las Cataratas del Iguazú en plena zona de Estación Garganta del Diablo quienes sintieron el característico olor en todo el área. En ese sentido, la legisladora advierte sobre los riesgos de que las cataratas pierdan el carácter de Patrimonio Mundial de la Humanidad y consecuentemente, el destino por excelencia del turismo internacional en la República Argentina y miles de puestos de trabajo genuinos.

En este marco, también hace referencia al olor nauseabundo en Colonia Wanda, en Puerto Libertad y hasta en la propia ciudad de Puerto Iguazú (es decir a unos 50 kilómetros de la planta) y en días de viento norte el hedor baja a localidades como Puerto Esperanza, Colonia Delicia, Victoria y hasta El Dorado (a poco más de 50 kilómetros).

· Pedido de informe al Ejecutivo Nacional 

Además, la Cámara de Diputados de la Nación resolvió dirigirse al Poder Ejecutivo nacional para que informe sobre las circunstancias en que se produjo el deceso de dos trabajadores en piletones de depuración de efluentes altamente contaminantes en la planta celulósica que la empresa Alto Paraná S.A. el 7 de octubre de 2005. Asimismo, solicita información respecto a la existencia o no de un túnel de “by pass” usado por esa planta para verter líquidos industriales en el río Paraná, volcados en crudo o directamente sin tratamiento alguno, en contradicción con la normativa ambiental vigente.

En los fundamentos de la norma se expresa que el 7 de octubre pasado, dos jóvenes vidas llegaron a su fin como consecuencia de un accidente sucedido en el área de depuración de efluentes del predio de la planta celulósica de Alto Paraná S.A., en Puerto Segundo, Municipio de Puerto Esperanza de la provincia de Misiones.

Textualmente se refiere que “la escasa o nula información suministrada por la empresa, junto a las varias versiones de vecinos e incluso familiares de las víctimas, crean una especie de “secreto a voces” sobre el tipo de accidente acaecido, con el desenlace fatal de los dos obreros que perdieron sus vidas y del procedimiento seguido para el rescate de los cuerpos”.

A modo de fuente testimonial, se transcribe un artículo publicado en el diario El Territorio de Misiones el 8 de octubre en el que se dio cuenta del hecho:

“Dos operarios de una empresa contratista que brinda servicios a la firma Alto Paraná perecieron ayer luego de caer en el interior de un piletón ubicado en el sector de tratamiento de líquidos y sólidos efluentes de la planta celulósica, informaron fuentes policiales. Los efectivos de la comisaría de Puerto Esperanza tomaron conocimiento del luctuoso episodio alrededor de las 18.20 de ayer, al parecer alertados por un llamado telefónico. Inmediatamente enviaron un móvil policial que al arribar al escenario del hecho constató la veracidad de la denuncia.

Según precisaron fuentes policíacas, anoche, alrededor de las 21, personal especializado logró rescatar los cadáveres de las profundidades de la pileta, en medio de un clima tenso en la fábrica y de suma expectativa. Al cierre de esta edición, una fuente de la fuerza de seguridad identificó a las víctimas fatales que, según apuntó, serían de apellidos Galeano y Duarte, respectivamente. De todas maneras, no trascendieron mayores datos de los mismos ni cuáles eran las funciones específicas que cumplían en la planta.

En el campo de las averiguaciones, trascendió que los trabajadores habrían estado realizando tareas de limpieza en el mencionado sector. En un momento determinado, y por causas que se investigan, ambas personas cayeron en el interior del piletón, perdiendo la vida prácticamente en el acto. Otra de las versiones que no fue confirmada anoche por los investigadores es la que habla de la supuesta peligrosidad del contenido existente en el lugar donde se precipitaron Galeano y Duarte. Sin embargo, según trascendió desde los informantes, se trataría de agua.

Anoche, representantes de la empresa Alto Paraná mantuvieron contactos con los familiares de las víctimas a fin de poner a su disposición los elementos que sean necesarios para afrontar las circunstancias derivadas de la tragedia. La firma en la que Galeano y Duarte desempeñaban tareas sería una empresa contratada por Alto Paraná, aunque no se especificó para qué tipo de actividades. En el caso intervino personal de la comisaría local y de la Dirección Criminalística de la Unidad Regional V de Puerto Iguazú. Las actuaciones fueron labradas por los efectivos del caso, con intervención del Juzgado de Instrucción II, secretaría Uno, de la ciudad de El Dorado, concluyeron los voceros policiales”.

A continuación, en los fundamentos se manifiesta que “la alta temperatura del líquido donde cayeron los obreros, el altísimo tenor de contaminantes que produjeron su deceso en forma instantánea, y las más de nueve horas que pasaron sin que se pudiera retirar los cuerpos sin vida, sugieren serias falencias de la empresa celulósica en el área de depuración de efluentes”.

Se menciona también que versiones extraoficiales indicaron que ante la imposibilidad de rescatar los cuerpos aparentemente se habría conectado el líquido de la pileta a un caño de gran dimensión encubierto, y en pocos minutos se encontraron los cadáveres de los obreros en el río Paraná.

“Es decir que, la empresa tendría instalado un conducto tipo “by pass” (conducto adicional) disimulado para la descarga directa de efluentes sin tratar en el río Paraná para uso habitual en dicha operación, especialmente después que duplicara la producción de celulosa de fibra larga hace relativamente poco”.

“De lo contrario –se cuestiona en la resolución- ¿cómo aparecieron los cuerpos en el río si los infortunados obreros cayeron en un piletón de depuración de contaminantes, bastante alejado de ese curso de agua? Estos detalles no oficiales del accidente laboral darían cuenta de la presencia de un mecanismo perverso para evacuar los desechos industriales de la planta”.

Por un lado, “unas piletas de descontaminación para consumo del público y los inspectores ambientales, y por el otro lado, cuando la fábrica está produciendo al máximo (lo habitual durante varios meses al año), un gran conducto alternativo disimulado que entrega al río Paraná toda la descarga de efluentes directamente en crudo, es decir sin tratar, sin depurar e incluso con el agua a temperaturas muy elevadas. Este mecanismo está prohibido en la República Argentina, en Misiones y más aún tratándose de aguas internacionales en la frontera de nuestro país con la República del Paraguay. Creemos que estos trascendidos, juntos con el sugestivo silencio de la empresa multinacional chilena merecen una eficiente aclaración”.

“No estamos en condiciones de afirmar que la situación sea la descripta anteriormente, pero son tantas en la zona las voces que se alzan advirtiendo sobre irregularidades, tan pocas las palabras oficiales de la empresa responsable y tan malos sus antecedentes ambientales que creemos que los interrogantes que penden sobre las circunstancias en que se produjo el accidente laboral no pueden quedar sin respuesta”, se establece en los fundamentos de la resolución para finalizar.

Activismo ecológico en la Mesopotamia

En el siguiente listado se enumeran las organizaciones que se encuentran trabajando en la región mesopotámica de nuestro país, las cuales también tienen su sede allí y todas ellas se encuentran nucleadas por la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo sustentable perteneciente a la jefatura de gabinetes de ministros de la nación. Existen además otras organizaciones a nivel nacional que si bien no se encuentran registradas en dicha región trabajan activamente por los problemas ecológicos de la misma. Es el caso de la Fundación Proteger. Como así además hay organizaciones que tienen influencia nivel mundial, uno de los casos emblemáticos es el de la Fundación GREENPEACE, quien se encuentra activamente comprometida s con cuestiones ambientales de la zona.Todas estas instituciones se encuentran trabajando en la siguientes áreas temáticas : -Ciencia;-Conservación -Desarrollo sustentable- Difusión Ambienta -Ecología -Ecosistemas -Humedales-Energía eólica-fauna Nativa, -Gestión ambiental, -Flora nativa -Patrimonio cultural histórico -Tecnologías, -Cambio climático, -turismo.A continuación de dicho registro se expondrán diferentes miradas críticas sobre estas organizaciones que se autoproclaman «sin fines de lucro».

Entre Ríos

• Asociación Ambiental "A´ Ñangareco Nderejhe" Entre Ríos
• Asociación Ambientalista
• Asociación amigos del Árbol-Paraná
• Asociación Ecologista Anaconda
• Ecourbano
• Foro ecologista de Paraná
• Fundación Eco Urbano
 Grupo Ecológico Cabayú Cuatiá
• Proyecto Tierra
• Red Entrerriana para el Desarrollo Sostenible
• SOS Villaguay, en defensa de la Cuenca del Río Gualeguay.

Corrientes
• Agencia de Cooperación en Ingeniería Ambiental
• Asociación Civil para el Conocimiento y la Acción Dirigidos al Desarrollo Integrado al Ambiente
• Asociación Ecologista Río Mocoretá
• Asociación para la Asistencia a la Comunidad
• Centro de Iniciativas para el desarrollo Local La Choza
• Continental NEAECO CLUB "ECO - CURUZU"
• Fundación Dr. Hugo Gauna
• Fundación ECOS Corrientes
 Fundación Iberá
 Fundación para el Desarrollo Aborigen
 Fundación Virgen Stellla Maris

Misiones
• Asociación Civil Comunidad integral
• Asociación Civil Ecoambiental
• Asociación Civil Ecoambiental
• Fundación Los Históricos del 86
• Grupo de Estudios Ambientales
• Grupo Ecologista Cuña Pirú
• Instituto Económico y Social Escuela Agrotécnica El Dorado e Ingeniería Forestal